Agradecemos en primer lugar, a la Fundación Amancio Ortega por dar la oportunidad por séptimo año consecutivo a niños de toda España, de poder tener una experiencia vital de esta magnitud, un año escolar, en nuestro caso destinados a Canadá.
Todos los niños, todos, son especiales que destacan por su excelencia académica en primer lugar, pero también creemos que la Fundación busca otros matices diferenciadores, niños que serán capaces de gestionar estar fuera de casa y adaptarse a familias, que en muchos casos están en las antípodas de las suyas, con costumbres y cultura que no tiene que ver con lo que habían vivido hasta ahora.
Cada niño es un faro diseminado a lo largo y ancho de Canadá ese territorio tan inmenso, cada niño está teniendo una experiencia diferente y magnífica.
Aunque algunos de ellos han tenido algunas dificultades, todos ellos están consiguiendo superar de manera ejemplar esas montañas rusas de lo cotidiano. Cada niño un Mundo, cada situación especial. Nos toca a nosotros sus mapas, ayudarles en lo que podamos y en la distancia, confiando en ellos y en su buen hacer.
Estamos seguros de que las personas que se despidieron de nosotros en agosto de 2019, han dejado de ser, para convertirse en otros seres aún más estupendos y brillantes.
Cada niño es un faro diseminado a lo largo y ancho de Canadá ese territorio tan inmenso, cada niño está teniendo una experiencia diferente y magnífica.
Aunque algunos de ellos han tenido algunas dificultades, todos ellos están consiguiendo superar de manera ejemplar esas montañas rusas de lo cotidiano. Cada niño un Mundo, cada situación especial. Nos toca a nosotros sus mapas, ayudarles en lo que podamos y en la distancia, confiando en ellos y en su buen hacer.
Estamos seguros de que las personas que se despidieron de nosotros en agosto de 2019, han dejado de ser, para convertirse en otros seres aún más estupendos y brillantes.
Gracias a cada MAPA, madre y padre del grupo de wassap de Canadá, que gracias a todas sus aportaciones, investigaciones, colaboraciones, paño de lágrimas, pero también de alegrías se está haciendo este pequeño proyecto en una realidad.
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